La primera describe la compleja relación entre moda y naturaleza desde el siglo XVI hasta la actualidad. Para ello, se vale del diseño de prendas con estampados animales y vegetales, y formas orgánicas. La segunda sigue un enfoque similar, pero centrándose en China.
El primer sector presenta espacios pequeños, determinados por las alturas de las vitrinas y el ancho de las circulaciones. El segundo sector duplica su altura para generar una sensación de mayor amplitud.
A partir de estos ejes, Studio 10 planteó un diseño de materiales translúcidos y livianos, que dan protagonismo a las piezas exhibidas y, al dejar entrever parcialmente los espacios, suscitan la curiosidad de los visitantes.
Los pasillos conducen hacia tres vitrinas circulares independientes, que exponen objetos destacados. El recorrido concluye en un espacio constituido por una vitrina continua, formada por un conjunto de tubos acrílicos, que recoge maniquíes con prendas de diseños actuales.
La exhibición se completa con la sección dedicada a la moda en China, dispuesta en un espacio oval revestido en tela. El diseño espacial de la sección presenta un enfoque más orgánico; es decir, no hay ningún eje principal ni una circulación lineal. Una rampa negra, que pende del techo, exhibe maniquíes ataviados con distintas prendas. En este punto, los visitantes pueden desplazarse libremente por el espacio, al tiempo que aprecian los objetos desde distintos puntos de vista.—