La aldea de Zhang Yan está situada en la ciudad de Chonggu, en los suburbios occidentales de Shanghai. Es la cuna de la cultura antigua y representativa de la montaña Fuquan. Con una historia milenaria, esta antigua aldea se construyó cerca del agua desde las dinastías Tang y Song, época en la cual Zhang Yan era muy próspera.
En las últimas décadas, la demografía del pueblo ha cambiado drásticamente, con un rápido descenso de la población joven, lo que ha tenido como consecuencia el deterioro del pueblo original. Como parte de una nueva política de desarrollo suburbano, el pueblo de Zhang Yan, como muchos otros pueblos y ciudades de China, ha optado por la renovación y el renacimiento.
El emplazamiento del museo cultural refleja la genealogía de los edificios del pueblo, que incluye la Sala de Historia del Pueblo (de la Dinastía Qing), la Casa de la Familia Zhang (una estructura en ruinas de finales de la misma dinastía), y un espacio abierto. Sus edificaciones vecinas son construcciones de dos o tres pisos de los años ochenta, y entre ellas se encuentra un importante hito religioso: un templo dedicado a la deidad local. Las salas de exposiciones del museo consisten en tres espacios con características únicas, junto con un patio de agua.
Debido al deterioro severo de la casa de la familia Zhang, solo se conservó su muro exterior, dentro del cual se construyó la sala de exposiciones contemporáneas. Esta sala, aunque sigue la tipología tradicional con un atrio y tejados inclinados hacia el interior, presenta un desplazamiento de treinta centímetros respecto a la estructura original.
En contraste, la Sala de Historia del Pueblo se ha conservado casi completamente. Se restauró su estructura interna de madera, se eliminaron los tabiques y se mantuvo el atrio original. El salón alberga un segundo espacio de exposición titulado “Tradición”. El suelo se renovó con placas de aluminio anodizado para resistir la humedad, asegurando coherencia material y espacial con la sala anterior. Además, se mejoró la iluminación para ampliar el espacio de manera atmosférica, conservando las paredes, el techo y el atrio.
Durante la investigación sobre la Sala de Historia del Pueblo, llevada a cabo por el equipo de arquitectura, se descubrió que históricamente existía otro edificio al norte. Por ello, la tercera sala de exposiciones, “Futuro”, se construye a partir de la renovación del emplazamiento original. Aquí se utilizó aluminio anodizado, tanto en el suelo como en el techo, generando una uniformidad que aporta una sensación de futuro, siendo una contrapartida dinámica para las dos salas de exposiciones anteriores.
La zona exterior de la tercera sala de exposiciones se mantiene como espacio abierto. Con los viejos árboles y bambúes del lugar conservados, un patio de agua y una zona de ocio ofrecen un espacio de descanso y social para los habitantes del lugar. Todas las nuevas construcciones son de hormigón blanco para responder al gris claro pintado de los muros vecinos.