El proyecto está situado en el barrio de Colegiales, en una zona donde abundan las viviendas de baja altura, los pulmones de manzana y las arboledas. Para integrarse al entorno, los estudios Mauas-Steinberg y Hauser Oficina de Arquitectura proyectaron dos volúmenes con siete unidades de diversas tipologías, concebidas como pequeñas casas individuales con amplios ventanales y en conexión con el exterior.
El edificio en forma de “C” cuenta con un patio interno, que articula las circulaciones verticales, y con un jardín situado en el fondo del lote.
Sobre la fachada del frente, las viviendas se retiran de uno de los muros medianeros para generar una serie de expansiones laterales, sin un uso determinado a priori. Por otra parte, sobre la fachada del contrafrente se encuentra una vivienda de dos niveles con acceso al jardín, dos unidades de dos dormitorios y una vivienda con terraza jardín.
La fachada que da hacia la calle cuenta con un cerramiento de paneles de metal desplegado, que le otorgan la identidad característica al edificio. Las enredaderas que crecen sobre la estructura metálica, aportan privacidad y protección de los rayos del sol a las unidades ubicadas en el frente del lote.
Los portones blancos de acceso permiten ingresar tanto al estacionamiento como al patio interno, que conecta los dos volúmenes. El patio articula una serie de escaleras y un ascenso que dan acceso a las distintas viviendas. Asimismo, cuenta con vegetación y se lo utiliza como espacio común.
La vegetación elegida para el patio, de color verde intenso, ofrece un contrapunto con la estructura del conjunto, que cuenta con terminaciones en color blanco y gris en la mayoría de sus elementos. Asimismo, se dispusieron una serie de enredaderas sobre el muro medianero, para colmar de verde los espacios a medida que vayan creciendo.
Las unidades con vistas a la calle poseen grandes puertas vidriadas, que brindan acceso hacia las expansiones laterales. Por otra parte, la unidad del último piso, dispuesta sobre el segundo bloque, cuenta con una escalera caracol que conduce hacia la terraza jardín.
Si bien el proyecto cuenta con diversas tipologías de viviendas y tipos de espacios exteriores, el uso de los mismos elementos y gamas de colores genera la integración y continuidad de cada una de sus partes. Por otra parte, el complejo cuenta con un subsuelo que articula las salas de máquinas y espacios de guardado complementarios.
La vivienda situada en planta baja, sobre el segundo bloque, cuenta con un amplio ventanal con acceso directo al jardín. Una pequeña pérgola de madera brinda sombra y genera un espacio intermedio entre el interior de la casa y el patio.
