La exposición “auto-màtic” tiene lugar en el Centre d’Art Santa Mònica[1], un antiguo convento renacentista en el corazón de La Rambla de Barcelona, convertido hoy en un centro de arte contemporáneo, aborda los límites y el potencial del dibujo generativo, explorando cómo la Revolución de la automatización está cambiando el trabajo de arquitectos, diseñadores y creativos.
La investigación fue desarrollada en el marco de Machinic Protocols), un proyecto dirigido por Edouard Cabay[2], dentro del Máster en Arquitectura Avanzada de IAAC[3]: “el título ‘auto-màtic es un homenaje a Méta-matics de Jean Tinguely, la serie de máquinas que producen obras de arte y que investigan la intrusión enérgica de la tecnología en nuestra sociedad”.
A través de preguntas sobre la automatización, la reproductibilidad y el papel de los “accidentes” arbitrarios como fuentes de experimentación creativa, la exposición reúne más de 120 dibujos desarrollados en los últimos tres años por más de 80 colaboradores que provienen de campos como computación, arte y diseño.
Dejando de lado la “mano del artista”, cada dibujo es el resultado de condiciones impuestas en lugar de ideas preconcebidas. Se basa en el principio de no diseñar la forma final de un producto, sino en enunciar las instrucciones que rigen su producción. Una vez que el proceso ha comenzado, se ejecuta por sí mismo y el “autor” se convierte en un espectador. El protocolo es la receta, un conjunto de instrucciones que dictan las acciones que se ejecutarán. Aunque fueron producidos por diferentes medios, incluyendo personas, robots, computadoras e incluso por fuerzas de la naturaleza como el viento y las olas, todos comparten un conjunto de características comunes: son siempre únicos y su resultado no se puede prever; no son creados por un individuo, sino por un sistema compuesto por actores plurales.
Aunque fueron producidos por diferentes medios, incluyendo personas, robots, computadoras e incluso por fuerzas de la naturaleza como el viento y las olas, todos comparten un conjunto de características comunes: son siempre únicos y su resultado no se puede prever; no son creados por un individuo, sino por un sistema compuesto por actores plurales.
Dos instalaciones completan la ruta de la exposición, centrándose en el dibujo performativo. En la primera, una serie de ocho ventiladores controlados de forma electrónica soplan hacia el centro de un lienzo, donde un bolígrafo unido a una vela se mueve con el viento. En un contexto de reciprocidad, donde el bolígrafo y los ventiladores dialogan, la máquina nunca deja de dibujar como en una suerte de danza perpetua.
La segunda instalación es un experimento en el que caen 10.000 gotas de tinta sobre un lienzo en movimiento desde 15 metros de altura. El lienzo móvil se mueve al ritmo de la caída de las gotas, para así formar una cuadrícula ortogonal. ¿Las gotas caerán verticalmente y aterrizarán en la posición precisa anticipada por el robot para formar una cuadrícula perfecta, o el movimiento del aire y otros factores afectarán su trayectoria?
La automatización puede incorporar desviaciones de las expectativas originales, que pueden interpretarse como imprecisiones, arbitrariedades o incluso accidentes, pero, al mismo tiempo, pueden permitir que surjan nuevos resultados. Como si fuera una metáfora de la nueva era de incertidumbre donde todo es posible, la verdadera intención de la exposición es desarrollar una actitud hacia la creación, donde el diseño se trate más de un proceso que de un resultado.
Lo inesperado está a la vuelta de la esquina.
Créditos: Yingxin Du y Ardeshir Talaei / Música: ‘Vrioon’ por Alva Noto y Ryuichi Sakamoto
[1] Arts Santa Mònica es un centro multidisciplinario, con un enfoque especial en la cultura y los medios digitales que se producen en Cataluña. Se presenta al público como un espacio de reflexión que fomenta las discusiones y genera ideas sobre los diferentes conceptos sobre la creación artística y su relación con el público: creatividad, conciencia, innovación, conocimiento, estética.
[2] Edouard Cabay, arquitecto y profesor de arquitectura, ha venido desarrollando, desde el 2015, una investigación denominada Machinic Protocols que utiliza técnicas de dibujo automatizado para explorar las nociones de indeterminación y el azar en el espacio. La investigación se ha llevado a cabo principalmente en el dominio de la academia arquitectónica, aunque se acopla fuertemente con otros campos como el diseño computacional, las tecnologías digitales, la caligrafía y la cartografía. Cabay fundo y dirige, Appareil, un estudio de arquitectura experimental en Barcelona.
[3] El Instituto de Arquitectura Avanzada de Catalunya (IAAC) es un centro de investigación, educación, producción y divulgación, con la misión de imaginar el futuro hábitat de nuestra sociedad y construirlo en el presente.
