El proyecto corresponde a una vivienda diseñada para una familia de cuatro miembros, situada en una zona residencial de la Prefectura de Gunma (Japón). El perímetro está delimitado por un cerramiento de policarbonato traslúcido, que da lugar a una serie de patios. Asimismo, genera una separación parcial con el entorno, para dar la sensación de que la casa flota en el aire.
La premisa principal del proyecto era generar una transición suave entre el barrio y la planta baja, y crear espacios abiertos que permitieran que la vida de los residentes se integrara a la ciudad.
Sobre el cerramiento de policarbonato se dispuso un riel con una cortina, que permite regular el grado de permeabilidad entre el patio y el entorno. En este sentido, al abrir por completo la cortina, el patio se vuelve una extensión de la calle. Lo mismo ocurre con las puertas corredizas que ofician de cerramientos en la planta baja.
Los programas están dispuestos a distintas alturas y los conecta un sistema de gradas revestidas en madera que comienza en la planta baja, en la cocina y el comedor. A excepción de los baños, todos los programas son de carácter abierto.
Al igual que los patios, la planta baja dispone de un sistema de rieles de doble altura con cortinas colocadas en la esquina del comedor.
Los dormitorios, espacios que requieren de mayor privacidad, ocupan el primer piso y cuentan con acceso a pequeñas terrazas, ocultas en dos de sus lados por el cerramiento de policarbonato.