En 2011, los municipios de Rüschlikon y Kilchberg unieron fuerzas para iniciar la construcción de una nueva escuela secundaria. Las instituciones reconocieron la necesidad de construir una escuela que contara con un horario diario reglamentado, y realizaron el encargo de un proyecto con esas características. El nuevo edificio, Campus Moos, está situado junto a la escuela primaria Im Moos, lo que facilita la transición entre los diferentes niveles y representa una tipología de escuela en sintonía con las exigencias pedagógicas contemporáneas.
De estructura robusta, el proyecto se asienta estoicamente en el paisaje y sus espacios al aire libre respetan los límites definidos por la población de árboles existentes.
El cubo compacto y denso tiene una superficie de 25 metros por 25 metros y se basa en un principio organizativo simple y de gran riqueza, caracterizada por una serie de vistas hacia el exterior y perspectivas interiores.
La materialidad se expresa de forma cuidadosa y modesta, de modo tal que cada uno de los colores de las cuatro estaciones puedan reflejarse en la sobria paleta de materiales de la nueva construcción, tanto por dentro como por fuera.
Las clases se complementan con el tiempo libre dentro de la estructura, tal como lo ilustra el alto nivel de flexibilidad presente en el programa de cada nivel del edificio. La planta baja cuenta con un área abierta con cafetería, espacios comunes y una amplia zona destinada a espectáculos (obras de teatro, eventos, asambleas).
Los distintos espacios ofrecen una gran variedad de usos y se adaptan fácilmente a las necesidades y requisitos tanto de los alumnos como de los profesores a lo largo de la jornada escolar o durante actividades recreativas. Un tercio de la superficie total de los niveles superiores no ha sido programada, dando lugar a un espacio que, además de funcionar como corredor y conector, funciona como área de aprendizaje informal y reunión.
Los dos tercios restantes, diseñados y definidos por E2A, se corresponden con las aulas: una configuración de planta clásica casi cuadrada de 72 metros cuadrados que permite disponer el mobiliario de manera flexible. Los elementos cuentan con un área total combinada de alrededor de 140 metros cuadrados que pueden combinarse de diversas formas y representan un espacio de aprendizaje abierto.
El sistema constructivo elegido permitió alcanzar los valores objetivos requeridos para obtener la certificación Minergie. La arquitectura y la propuesta pedagógica hicieron posible que la escuela secundaria Campus Moos adquiera relevancia como institución educativa, y es el resultado de una decisión basada en la sustentabilidad que, sin duda, influirá en el futuro desarrollo de los niños y niñas de las dos comunidades.